Si bien representan el 60% en las carreras vinculadas a la agroindustria y constituyen el 40% de la fuerza laboral del sector, únicamente un 3% llega a obtener un cargo directivo.
por Luciana Mateo
LA PLATA (Corresponsalía).- Los datos fueron recogidos por la Asociación Marianne, una organización que reúne a mujeres franco-argentinas referentes en las ciencias, los negocios, las artes y otros ámbitos de la cultura.
En su estudio, la Asociación constató que, si bien las mujeres representan el 60% en las carreras vinculadas a la agroindustria y constituyen el 40% de la fuerza laboral del sector, únicamente un 3% llega a obtener un cargo directivo.
En ese ínfimo porcentaje se encuentra la ingeniera industrial Silvia Taurozzi, ex CEO de Louis Dreyfus Company de Latinoamérica, una multinacional francesa que se dedica a la comercialización de bienes de consumo agrícolas, energéticos y petrolíferos.
“Faltan mujeres en los puestos de decisión del sector”, dice Taurozzi, primera presidenta de Marianne.
“Sin embargo, hoy no veo obstáculos por los cuales no podrían participar más mujeres”, agrega.
Entrevistada por LA CAPITAL, la empresaria explica que “cuando hablamos de mujer rural, hablamos generalmente de las productoras, pero hay toda una cadena que es bastante larga: hay mujeres en el área de acopios, comercialización, producción, industrialización y marketing”.
– ¿Cómo interviene la mujer en toda esa cadena?
– Todavía no lo sabemos muy bien porque faltan estadísticas importantes. Sí sabemos que la participación de la mujer en toda la cadena productiva está aumentando, yo misma lo vi en Dreyfus: cuando empecé, prácticamente no había mujeres y al final de mi carrera las había en todos los sectores, incluso en las fábricas. Lo que sí notamos es que, claramente, faltan mujeres en los puestos de decisión.
– Como en todos los ámbitos…
– Sí, pero acá es más llamativo. Cuando se observa el promedio general de empresas y mujeres en puestos directivos, vemos que la participación femenina se está acercando al 10%. Pero en este sector en particular, hay un 3% de mujeres en puestos de decisión.
– Las entidades que representan al sector también están comandadas por hombres…
– Con el equipo de Agro de Marianne hicimos un estudio y observamos que –en primer lugar- hay una falta de conciencia, es decir que el tema no está sobre el tapete. Fuimos bien recibidas y no hubo una discriminación activa al respecto pero notamos que el tema no está en agenda, entonces nadie se lo cuestiona ni aplica ninguna política al respecto. Queda como que “esto es una meritocracia y el que quiere acceder, accede”. Creo que recién ahora algunas asociaciones se están cuestionando por qué en una mesa de productores –que son enormes- no hay ninguna mujer. Recién ahora se está tomando conciencia, pero nos queda un gran trabajo por hacer y por eso nos parece importante visibilizarlo.
Falta de financiación y de infraestructura
– ¿Qué problemas afrontan las mujeres que se dedican a este rubro?
– Como problemática mundial se repite el tema de la falta de financiación; en varios países también es un tema el título de propiedad porque muchas veces se otorga el título al marido y no a la mujer. Otro gran tema es la infraestructura: hay muchos parajes alejados de los centros principales y las condiciones de acceso –como los caminos o los servicios de telecomunicaciones- afectan más en términos relativos a las mujeres que a los hombres.
– ¿Sintió alguna diferencia con sus pares hombres por el hecho de ser mujer?
– No, en ese sentido estoy contenta y me siento una afortunada porque, particularmente, no sentí discriminación durante mi carrera.
– ¿Qué aportes pueden realizar las mujeres al sector?
– En todo lo referido a sustentabilidad y cuidado del medio ambiente, las mujeres tenemos una visión más considerada y amigable; también en recursos humanos podemos brindar otro matiz. Y desde el punto de vista de la cadena de alimentos y nutrición, me parece absolutamente lógico que haya una participación femenina: estamos finalmente hablando de lo que comemos.
Libertad, Igualdad y Fraternidad
Taurozzi presidió Asociación Marianne entre 2010 y 2012. La idea que en un principio convocó a 15 mujeres empresarias por iniciativa de la Embajada de Francia, hoy se ha convertido en una organización con alrededor de 130 integrantes.
“Originalmente, había una visión de convocar únicamente a mujeres de negocios pero hoy hay una importante diversificación con mujeres de la cultura, el arte y la ciencia”, cuenta Taurozzi.
La Asociación que busca promover lazos entre Argentina y Francia tomó su nombre de Marianne, la figura alegórica de la República Francesa que simboliza los valores de Libertad, Igualdad y Fraternidad.